Desilusión e indecisión


Hola luchadores soñadores~
Los que me siguen en instagram ya tienen una idea de lo que me ha pasado estos días, pero para los que me leen por blog o a través del facebook, voy a contarlo, así me puedo explayar y hablarlo más detenidamente y con detalles. 

Aunque como dice en el título estoy indecisa, por lo que no voy a decir el nombre aún de la clínica de la que voy a hablar. No quiero dar mala publicidad de la clínica puesto que hay gente que tiene buenas experiencias. Solamente quiero reflejar lo vivido por mi y lo que ha afectado esto a mi ánimo y mi salud.

Como ya he dicho anteriormente en otras entradas, estaba en lista de espera para asignación de donante. Primero fui a consulta, me dijeron que tenían que hacerme un ciclo de prueba a ver si mi endometrio reaccionaba y engrosaba. Una vez comprobaron que sí, me hicieron una histeroscopia diagnóstica a ver si el útero estaba en buenas condiciones y tomaron una biopsia a ver si era secretor.

Una vez vieron que podía ser viable, en un principio, continuar con una fiv con ovo, tuve una consulta el 1 de junio en la que empezaron con la búsqueda de mi donante y en dicha cita la ginecóloga me dijo que la espera sería de 2-3 meses.

Hasta ahí todo bien, lo que ya se sabía.

Tras bastantes efectos de la meriestra: mareos, dolores de cabeza, aumento de peso, hinchazón de tripa, cambios de humor... Y tras nada más y nada menos que 4 meses (y unos días) de espera desde mi última revisión. Decido no dejarlo más y ponerme en contacto con la doctora.

Decidí hacerlo por e-mail puesto que no consideraba que fuera algo que requiriera una respuesta inmediata, solamente quería saber si todo iba bien, etc. Mi sorpresa llega cuando me llega un autoreply (respuesta automática) diciendo que ella está de baja por permiso de maternidad y que no podrá atender a dicho mail hasta su incorporación laboral en febrero de 2017. 

¡Siquiera sabía que estaba embarazada! Hacía 4 meses que había tenido mi última revisión y en las ocasiones posteriores en las que nos comunicamos (a finales de agosto- principio de septiembre un par de veces) no me había dicho que estaría de baja y que mi caso lo llevaría otra doctora. Es más me dijo que la segunda quincena de septiembre me llamarían.

Al ver este panorama me enfadé muchísimo pero a la par estaba muy muy desilusionada, con el sentimiento de querer dejar todo o al menos dejar esta clínica. Estos últimos meses había decaído mi ánimo y la confianza con las esperas y más aún con las constantes desilusiones que he tenido con ellos.

Decidí esa misma tarde llamar a la clínica a ver qué pasaba, por qué no se me había notificado nada y demás. La recepcionista no pudo darme respuestas, tan solo le pasó la notificación de llamada a la doctora que me han asignado ahora y que me iba a llamar hoy.

Dado que ya no me fiaba de que me fueran a llamar hoy, porque ha sido un pasotismo y una mala gestión muy grande, decido además de haber llamado por teléfono, escribir un mail a la "nueva" ginecóloga. La verdad es que no ha sido un correo del todo amigable, pero no podía ocultar mi desánimo, enfado y frustración.

Al final sí me ha llamado al final de la mañana.

Contándome lo siguiente:

Tienen dos posibles donantes que encajan conmigo, PERO (siempre hay un pero) les faltan una prueba que tardará 2-3 semanas. Por lo que me toca esperar ese tiempo, pasado ese tiempo y cuando tengan los resultados, se pondrán en contacto conmigo para una revisión, que miren el estado de mi útero y ver cuando comenzamos.

Todo envuelto en un halo de excusas y disculpas. "Es que como ha sido verano y las donantes muchas son estudiantes...", "es que teníamos gente en lista de espera desde mayo..."

Pero a la par envuelto de un desconocimiento del caso que no me ha gustado ni un pelo. "Me cuentas en ese momento cuando ha sido tu última regla"... Ejem, yo no ovulo, no he tenido la regla. "Ah si es verdad, me dijiste que estabas con meriestra"...  Sí, la cual llevo ya dos cajas sin receta y si me haces esperar 3 semanas voy a necesitar otra más. "Ya pero como ya falta poco y tenemos que mirar el útero tienes que seguir tomándola"... Pues muy bien, más vale que esa cita sea antes de que necesite otra caja.

En fin, que en eso ha quedado la llamada, que en 2-3 semanas me llaman, si todo va bien y una de estas donantes encaja conmigo.

Pero mi desilusión y frustración siguen ahí, mi desanimo y la espera pesa mucho, parece que nunca va a llegar siquiera el momento de comenzar.

Y estoy pensando en hacer un cambio de clínica.

Como ya he dicho anteriormente y por instagram, mi padre es uno de mis grandes apoyos, y con él es con el que más he hablado de esto y estoy sin saber que hacer, con mucha indecisión.

Pienso que si me cambio es empezar de cero, en otra ciudad, lo que conlleva viajes, entre otras cosas. También pienso que si pido cita en otra clínica, cuando me la quieran dar al final sería más o menos el mismo tiempo que el que estipula mi clínica que queda para comenzar. Además de nuevas pruebas, aunque aporte todo lo que tengo hasta ahora. Y no sé si tengo fuerzas para comenzar de cero.

Por otro lado pienso en quedarme y no confío en la clínica, me falta confianza, las malas gestiones y todo lo que ha conllevado pesa y mucho. Pero parece que ya está ahí, el comienzo.

¿Qué haríais? Ya sabéis los costes que lleva esto y más siendo una persona sola y más necesitando ambos gametos. El dinero ya pagado por la lista de espera, no me lo devuelven. Cambiar de clínica conlleva más costes, primeras citas, nuevas pruebas, tratamientos y viajes. Sé que es importante la calidad, la confianza y todo, pero visto que el comienzo está a dos semanas, no sé que hacer. Aunque al final de todo lo que más me molesta es el tiempo perdido y los malos ratos que he pasado y lo que ha afectado a la salud y a todo.

Espero contaros pronto la decisión tomada y si al final me quedo en esta clínica, espero que cumplan las dos semanas o tres y comenzar pronto.

¡Tenemos que seguir luchando!

Comentarios

Entradas populares